Una observación inusual o rara es una de las muchas alegrías que puede proporcionar la observación de aves. Una de las partes clave de ese descubrimiento es documentar lo que encontraste, asegurando así que cualquier dato único pueda ser apreciado por otros.


¿Qué es documentar?

Documentar consiste en aportar comentarios escritos, fotografías, grabaciones de audio o vídeos de una o varias aves. La documentación aporta evidencias clave como soporte para una observación inusual o inesperada. Es importante intentar siempre aportar la mejor evidencia posible. Cuantas más evidencias aportes, más fácil resulta para los demás apreciar tu observación.


¿Cuándo debería documentarse una observación?

Se solicita aportar documentación cuanto los filtros de calidad automatizados de eBird detectan una especie o una cantidad inusual en un listado. Puede que no se permita incluso enviar el listado sin añadir algún comentario sobre la observación. Incluso aunque no sea requerido para determinadas observaciones raras, siempre es recomendable documentar las aves incluidas en los listados. Unos pocos comentarios rápidos acerca de lo que viste o escuchaste aporta información muy útil a otros usuarios o revisores regionales, y puede servir además como un bonito recuerdo para ti a unos años vista.


La documentación aplica también a los conteos. 

Si se te solicita documentar una cantidad inusual para una especie, podrías sacar una fotografía del bando, o podrías describir cómo lo contaste o cómo estás seguro de que tu cantidad es correcta. Por ejemplo: “Se cuenta individualmente cada ejemplar del bando”, o “conteo estimando grupos de 100 ejemplares cuando volaban frente a mi”. (Más detalles sobre diferentes maneras de contar aves aquí).


¿Qué no se considera documentación?

En eBird, limitamos la documentación a notas, grabaciones o fotografías de aves vivas salvajes. No se consideran como documentación las huellas, plumas, nidos, huevos, egagrópilas, etc.


¿Cómo documento las observaciones?

¡Documentar tus observaciones es importante y fácil! Todos los eBirders pueden proporcionar documentación excelente en sus observaciones destacadas siguiendo dos sencillos pasos: 1) incluyendo documentación física cuando sea posible, 2) escribiendo una descripción detallada. Comprueba nuestro vídeo del curso eBird Essentials, o lee los consejos debajo para aprender algo más.




1. Reúne documentación física

Las fotos y las grabaciones son la mejor documentación posible. Incluso las de poca calidad pueden ser suficientes para establecer una identificación. Comprueba nuestro artículo sobre cómo subir fotos y grabaciones. Todo son ventajas: tienes un archivo permanente y gratuito de tu documentación de aves raras en eBird y al mismo tiempo tus grabaciones contribuirán a un archivo científico enorme en la Biblioteca Macaulay.



Ejemplo de documención de una cita de Pardillo alpino por César Diéz (S42587657).


No necesitas una cámara fantástica o un equipo carísimo de grabación para proporcionar documentación. Una fotografía sacada a través de tus primáticos o una grabación de audio con tu teléfono es también documentación y ¡puede ser muy valiosa!


2. Proporciona una descripción detallada

No todo el mundo tiene acceso a una cámara o una grabadora. Ni la mejor foto puede sustituir a una experiencia vivida en primera persona. Una descripción detallada de lo que viste o escuchaste puede ser extremadamente útil con o sin evidencia física. En nuestra experiencia, tomar las notas en el campo mejorará tus habilidades y te ayudará a salir más al campo. Mira debajo algunas recomendaciones sobre qué escribir en tu descripción.


Transmitir con precisión lo que observaste es lo más valioso que puedes hacer en una descripción escrita: o cómo contaste las aves en un gran grupo, o qué características diagnósticas observaste para una especie rara. Para obtener más detalles sobre qué hace buena a una descripción, puede consultar los “Elementos de la descripción de un ave” debajo, y leer este útil artículo de Dave Irons.


Elementos de la descripción de un ave

Debajo, la revisora Lauren Harter ha resumido los elementos de la descripción escrita de un ave, estructurándolo de menos a más útil. Recuerda: cualquier información que proporciones es útil, y ¡cuanta más información, mejor!.


Más útil:

Anota las características diagnósticas

La mayoría de las aves tienen rasgos únicos que los distinguen incluso de especies cercanas de aspecto muy similar. En tu descripción, incluye las características que te ayudaron a identificar un pájaro inusual. Por ejemplo: "Anillo ocular incompleto", "dos franjas alares blancas" o "reclamo diagnóstico bisilábico". Una buena regla general es tratar de incluir al menos tres características diagnósticas independientes que hayas visto o escuchado. En caso de duda, describe todas las características que observaste.

Explica cómo descartaste especies similares

¡Este apartado es habitualmente más valioso incluso que la propia descripción del ave!... aunque en ocasiones no es necesaria. ¿Qué podría confundirse con un treparriscos? Pero, si estás reportando un Ratonero calzado, por ejemplo, fuera de su área habitual de distribución, una descripción muy general podría describir también a un ratonero común. Para la la mayoría de las aves raras, un cierto análisis sobre cómo fueron descartadas especies similares resulta de gran utilidad.


Documentación de un Agateador euroasiático por Miguel Ángel Madrid (S37280165).


Realiza anotaciones detalladas en el campo

El mejor momento para tomar notas sobre tus observaciones es precisamente cuando las estás realizando. Toma notas en el campo, idealmente usando eBird Mobile. ¿Qué aspecto tenía el ave? ¿Cuál era su comportamiento? ¿Emitía algún reclamo? Incluso si tomaste alguna fotografía, vídeo o realizaste alguna grabación de su reclamo, las descripciones realizadas en directo son tremendamente útiles. Aprender a realizar una descripción de un ave va de la mano con convertirse en un buen observador. 


Anota la edad y el sexo

Cuando pueda ser determinado, tener en consideración la edad y el sexo del ave es esencial y debería ser una parte fundamental de tu descripción. Muchas aves tienen un aspecto drásticamente diferente en función de estos factores, lo que puede hacerlas mucho más fácil o difícil de identificarlas.


Reconocer la rareza de la observación

Si buscas observaciones en eBird, quizá hayas encontrado anotaciones como *”Temprano”, “**Muy raro”, “Primer registro regional” o “****MEGA!!!. Recomendamos estas anotaciones como indicación de que el observador era consciente de la extraordinario de la observación. Estos son varios ejemplos de cómo puedes indicar al revisor que has dedicado cierto tiempo a evaluar tu observación: “Mi primero de la primavera, más temprano de lo habitual este año”, “Estaba observando un grupo de agachadizas comunes buscando agachadizas chicas, que sería relevante para la provincia, y en cuanto vi este ejemplar sospeché que había encontrado una”.


También útil

Los siguientes puntos son los elementos más usuales en las descripciones de eBird, pero los usuarios habitualmente se detienen aquí y se quedan cortos al describir el ave en cuestión. Los elementos listados debajo son habitualmente insuficientes por si mismos para constituir documentación adecuada de una especie. Por favor considere añadir los puntos descritos en los puntos anteriores.

 

Explicar si estás familiarizado con esta especie comparándola con especies similares

Quizá tengas cierta experiencia con la especie en tus viajes a otros lugares; esto puede ser aconsejable anotarlo. Recuerda sin embargo que añadir “He visto esta especie muchas veces en mi jardín” no es probablemente suficiente para validar una observación. De hecho, puede ser una advertencia de que el ave no haya sido estudiada con suficiente cuidado bajo la asunción de que era común. En realidad, los observadores que se encuentran visitando una zona cometen habitualmente errores de identificación porque asumen que una especie es común cuando en realidad es bastante rara en el área en la que están observando aves.


¿Es un individuo conocido?

Si sabes que estás observando un ave que sigue presente en una zona, es importante anotarlo así. Incluso si no estás seguro, comenta tus sospechas. Por ejemplo: “Posiblemente el ave que fue observado aquí hace un mes”. Por el contrario, si no es un ave conocida pero pudiera ser confundida con ella, anótalo también: “No es el ejemplar observado hace un mes. Aquél era un adulto y este es un juvenil”. En ocasiones, todo lo que hace falta es anotar “sigue presente”. Si tienes fotos, escribe algo así: “sigue presente, se adjuntarán fotos”. Por supuesto, nunca está de más documentar incluso una rareza conocida con más información. Esta información se convierte en especialmente valiosa si tu observación termina siendo la última vez que el ejemplar es observado.


¿En qué hábitat se encontraba?

Algunas aves tienen preferencias muy específicas, y puede ser difícil deducir por la localidad cómo era exactamente el hábitat en que se encontraba. Anotar la altitud, el tipo de hábitat, la vegetación dominante, si existen masas de agua cercanas, etc puede ser muy útil.


Dónde estaba posada o cuándo voló

Por ejemplo: “El ave estaba posada en una rama seca de un roble a 10 metros de la segunda cascada, a unos 2 metros sobre el suelo. Desde que me vio aparecer, permaneció 10 segundos en ese lugar antes de salir volando”. Es útil saber exactamente donde estaba el ave si algún otro observador quiere intentar verla, y el comportamiento puede ser útil para evaluar una observación. Pero para una observación que ha hecho saltar un filtro, no es suficiente.


Distancia al ave, iluminación, óptica empleada, distancia al ave

Estos detalles y otros similares pueden ser importantes, especialmente para observaciones extraordinarias, y son habitualmente solicitados por los Comités De Rarezas.


Narrativa incidental

Por ejemplo: “Estaba tomándome un descanso durante los preparativos de la boda de mi primo Juan y decidí salir a dar un paseo. Estaba caminando junto a un arroyo, bastante despacio porque estaba muy embarrado, observado las aves que salían a mi paso, cuando reparé en este ave”. Estas narrativas tienen valor ya que ayudan a colocar la observación en un contexto y te ayudarán a recordarlas mejor dentro de unos años. En ocasiones pueden contener información valiosa, como la hora, ubicación precisa, condiciones meteorológicas y otros observadores. Sin embargo, generalmente no son de gran ayuda para evaluar el registro ya que no suelen contener información sobre el ave en si misma. 


Muchas gracias a la revisora Lauren Harter por aportar gran parte del contenido de este artículo.